Iyona estaba jugando cuando su novio se acercó. Ambos querían follar pero se habían quedado sin condones. Su novio quería follársela desnuda, pero Iyona insistió en no aceptar, no quería quedarse embarazada mientras aún estaba en el colegio. Al no tener otra opción, Iyona tuvo que ir a una tienda cercana para comprarlo. Iyona tiene la costumbre de robar cosas. El personal de la tienda también se dio cuenta y esta vez la atrapó. Condujo a Iyona hacia atrás y la obligó a sacar todos los artículos robados. También la obligó a quitarse toda la ropa, incluso metiendo su dedo en el coño de Iyona para ver si escondía algo dentro. El hermoso cuerpo de Iyona lo hacía irresistible. La amenazó con informar esto a la escuela si ella no escuchaba. Y así sin más, la encerró en este lugar, siempre desnuda para poder follársela a su gusto, y cada vez eyaculó sobre su útero. Por suerte para Iyona, otro empleado la descubrió y se la llevó de este lugar. Pensé que todo había terminado pero ¡no! Una vez más, su cuerpo seductor excitó sexualmente a esta empleada...
